Habemus plantam (I)

Desde mi punto de vista, una de las labores más complicadas de llevar a cabo dentro de este desarrollo que supone la evolución de un proyecto arquitectónico es la distribución de plantas... casi hasta el punto de estresar la mente de modo que se generan multitud de opciones más o menos válidas que tienden a emborronar el concepto dirigido que maneja el proyecto! ¡qué fácilmente condicionable es la mente humana! free your mind!
Creo que es muy importante que durante el desarrollo del trabajo, como siempre he ido realizando un feedback continuo que me ha permitido, por un lado, afirmar que las hipótesis de partida se cumplen con el desarrollo del mismo y, por otro, poner en valor el trabajo introduciendo nuevos elementos que mejoran o amplian los conceptos de partida.

Se ha partido de una planta intermedia -viviendas: nivel 10 de un total de 16 con unas dimensiones medias aproximadas de 18x30 m.- en la que se ha generado una distribución pseudo-concéntrica respecto al núcleo vertical de comunicaciones que se pretende permeable de modo que la sección vertical variable de la edificación genere un efecto de variación en las plantas así como en la sección lo que a su vez se convierte en la evolución con este movimiento de las tipologías de viviendas, superficies, estancias y planteamientos lo que considero que enriquece el proyecto, permitiendo la el acceso de distintos grupos poblacionales; desde los cada vez más comunes 'singles' hasta las familias más tradicionales de dos personas y 1 hijo.
La pretendida permeabilidad del núcleo vertical de comunicaciones es más fenomenal que real debido a las limitaciones impuestas por la sectorización de incendios. En todo caso, nos permite generar un difuso impluvium de luz cenital que se cuela en todos los niveles de la edificación y llega al foyer en planta baja... aunque esto será objeto del siguiente desarrollo de manera que se puedan seguir contrastando las hipótesis de partida.
Los espacios residuales variables que se generan en la planta contrastan con la rigidez de, por un lado, la planta en sí, y por otro, con la distribución (por el momento) de las viviendas. Se aprovecharán para desarrollar pequeñas actividades, juegos, generación de espacios de relación... posiblidades! Se pretende del mismo modo que estas zonas de relación sean más permeables con el exterior de manera que permitan la entrada tamizada en ocasiones de la luz y/o ventilación (esto último está por estudiar aún).